World music desde el inconsciente con Moloco

Desde Los Ángeles, California, les presentamos a Moritz Fortmann, mejor conocido como Moloco. Un músico alemán, muy latino por cierto, que nos trae world music y electrónica alternativa. Un nuevo talento que tiene mucho para aportar. El amor por la música y la mezcla de sonidos de todo el mundo se siente natural. El crecimiento en las últimas semanas ha sido importante para él, y lo sabe.

Su próximo álbum, Baile de Paloma, próximo a lanzarse, mezcla mucho groove y nos hará mover la cadera. Hablamos con Moloco acerca de esta producción, de cómo el encierro jugó un papel importante en la creación de este cuerpo de trabajo y  su amor por latino-américa.

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¿#Aquésuena Moloco?

Para mí es siempre difícil decir. Justamente con este proyecto, cuando lo terminas, siempre estás buscando un mercado, un niche, algo donde puedes poner la música y me cuesta encontrar música parecida. Te lo puedo decir de una forma más general. Para mí, es música electrónica con elementos de world music e indie, uso guitarras.

Noto mucha influencia latina. ¿Qué hace que decidas ir por esa línea y no electrónica, estrictamente?

El elemento latino en mi vida tiene 20 años ya. Viví en Argentina, Bolivia, México. He viajado por latino-américa, y mi esposa es nicaragüense. Siempre me interesó la música, cultura, me ha fascinado. Es algo muy natural. Justamente para este proyecto, salió sin pensar.

No estaba pensando en un álbum ni la música que quería hacer. Fue en el lockdown, en las noches que no tenía mucho para hacer, empecé a hacer música. Hice una, después otra, y llegué a una colección de canciones que tenían una conexión. Estaba mucho en ese ambiente. No todas tienen elementos latinos, casi la mayoría. Fue algo natural, sin planear.

Ya escuché lo nuevo que viene. Hay congruencia en el sonido. A pesar de no ser algo planeado, encaja todo.

Me salió muy bien hacer mucha música en pocos días. Hice muchas canciones, la mayoría y más, en 2 semanas. Obviamente no el final, pero sí la base. Así que tenía esa comparación. También sentí muy bien lo que funciona y lo que no. Creo que fue ese momento muy creativo por un tiempo concentrado. Es natural que las cosas salieron de la misma onda, imagino. Por eso se siente la conexión. Trabajé más en esas canciones para finalizarlas, saber que estaban bien. 

¿Cuál fue el proceso detrás de ‘Baile de Paloma’?

La raíz de cada canción fue muy intuitiva; no fue con un concepto, un mensaje que quiero expresar. Creo que fue una respuesta de esos días que estamos viviendo. Aquí en Estados Unidos sentimos una onda muy pesada, en este momento. No solo por COVID-19, sino por la administración actual. La lucha de la gente afroamericana también. Son cosas muy tristes, que pesan mucho en nuestras vidas y nos afectan.

Creo que para mí hacer música en este momento fue una salida, buscando cosas que amo, que me llenan de felicidad. Así creo que las canciones tienen un elemento. O Amor representa la lucha de LGTBQ+. Las canciones son abstractas. No son un mensaje, una lyric song. Creo que cada persona puede tener su propio sentimiento. Esa canción está dedicada a los hermanos y hermanas de esa comunidad. Otras canciones que no han salido todavía, como Mi Barón, aunque parece una canción alegre, el tema es muy serio. Es una mujer que canta sobre la lucha de tener comida, cada día, hablando de su marido que se fue a trabajar y no sabe cuándo regresa. Cada canción tiene un elemento así, que para mí significa algo.

Creo que esas cosas se pueden hablar muy bien en una conversación, pero para poner demasiado detalle en forma escrita, para una canción, es difícil. Alguna gente lo podrá hacer muy bien, pero eso no es lo mío. Creo que para mí la música es intuitiva, que sientas algo, que te pueda dar algo. 

¿Qué estás escuchando?

Diferentes cosas, me acostumbré a Spotify. Antes no me gustaba, pero tengo me ha ayudado a descubrir nuevos artistas. Me gusta mucho Channel Tres, me encanta. Música House, pero soul, es diferente. Romare también. Siento que tiene un approach parecido al mío al hacer música. Sonamos muy diferente, pero tiene una forma parecida en hacerlo. Una banda indie brasileña, Tagua Tagua. Me parece genial, Preso no Amanhã es mi favorita.

Sé que hay una comunidad de garífunas en Guatemala, hace poco estaba escuchando esto. Me encanta. Siempre me ha gustado la música latina con influencia africana. Como Costa Atlántica en Colombia, se siente mucho. Lo que no conocía era eso y descubrí por mi esposa. Nicaragua también tiene una comunidad grande, al igual que Honduras. Me parece muy especial. No te podría decir una banda, recién estoy conociendo.

¿Qué hacés cuando no hacés música?

Mi background es en media, post-producción. Hice corrección de color, para cine, por muchos años. También documentales, siempre acerca de la cultura. En estos días trabajo para una empresa que hace software para corrección de color. Se llama Red Giant. Hacen plugins, si usas after effects, los puedes usar para diseño gráfico, efectos especiales. Soy product manager ahí. Trabajo con un equipo de programadores, y desarrollamos esto. Lo hago hace dos años, es algo nuevo para mí. Es algo que combina muchas cosas. De niño quería ser inventor, es algo así. Puedes trabajar con un equipo y pasa. Es genial. 

Si estás enfrente de una puerta, tocás el timbre, ¿quién te abre?

Necesito un momento para pensar (risas). Jimmy Hendrix. Conecto mucho con su música, me parece un tipo muy interesante, con un corazón bueno. Vivía con mucha locura. La música para mí es mucho, tengo que sentir algo. La música que hago, si no siento nada, no vale para mí. Él fue muy así, fue su manera de hacer música. 

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Pueden encontrar más música de Moloco en Spotify.