Opinión

Lo Extranjero

Texto de: Valerie Andrews

Hoy estoy sentada en mi cama pensando en cómo decir lo que quiero decir. Estoy entrando a mi casa, regresando de filmar un proyecto grande. Grande grande. Todos estamos muy emocionados porque es internacional y es un gran reto. Pero, hay algo que ahora me cuestiono mucho desde que me fui.

Aquí, en Guatemala, tenemos un gran fanatismo por todo lo que sea de fuera. Especialmente gringo y claro, europeo. Todos somos víctimas de esto. Yo incluso soy una de las peores perpetradoras de este estereotipo de que “todo lo extranjero es mejor.” 

Y sí amigos, por lo menos en mi área de trabajo, la actuación, la educación tiende a ser mejor afuera. Muchos de los actores y actrices que más admiro estudiaron en el Reino Unido, Estados Unidos y Australia. Y por esa misma razón es que cuando tuve la oportunidad: ¡me fui! Y lo amé. 

Ha sido espectacular, pero estar lejos de añoranza de lo propio. Me impactó mucho no tener la opción de volver a Guatemala. Extrañaba el calor latino de mis amigos y familia y cosas tan básicas como los frijoles y los Tortrix. Irónicamente preferimos marcas de café extranjeras, marcas de ropa extranjeras; cualquier cosa que no sea de aquí es inmediatamente superior. Pero hay una cosa algo sorprendente y es que uno necesita reflexionar sobre este aspiracionismo extranjero y verdaderamente pensar si es en serio que todo lo extranjero es mejor.

Una de las cosas más curiosas que he observado es que tomamos como moda o referencia todo movimiento que se genera en los Estados Unidos. Un ejemplo que hace que me tiemble el ojo fue el de Black Lives Matter. Vi cualquier cantidad de cuadritos negros en Instagram y muchos posts. Curiosamente, en las protestas aquí en Guatemala… hay un silencio que retumba. La brutalidad policial que se está peleando es algo que vivimos los que estuvimos en la protesta. Yo estuve en el parque cuando de la nada se empezó a esparcir el gas lacrimógeno. Y, uy que sorpresa, escucho poco de muchas personas que las vi activas con BLM. ¿Acaso el movimiento extranjero es mejor que el nuestro? ¿Acaso sólo ese vale la pena?

No voy a demonizar a nadie por cómo eligen participar en política. Hace algunos años decía que ir a protestas no funcionaba, que yo manifestaba a mi propia forma. Es algo nuevo que agarré este año de ir a protestar y ser más activa políticamente. Fue un cambio de pensamiento radical de mi parte. Me cae un poco mal que me tomó tanto tiempo darme cuenta. Soy una persona que ha tenido muchos privilegios. Me tomó irme fuera para darme cuenta que no todos lo tienen. Y que si yo tengo el tiempo, la energía y la convicción es mi deber como humano pelear por que las demás personas también puedan tener una vida digna.

Pero es muy interesante que cuando se trata de Guatemala, cuesta muchísimo hacer que nos sumemos a la causa. Ni me quiero meter en el tema de las artes porque es exactamente lo mismo: cualquier cosa que sea producto de fuera va a ser mejor. Vamos a ver shows a Broadway y tenemos membresías de Netflix, pero ¿y las obras de teatro aquí? ¿Acaso vemos películas nacionales? Yo también soy culpable de ésto. 

Sí, irme fuera y tener educación especializada en actuación hizo una gran diferencia en mi técnica y en mi confianza. Sin embargo, hablando con otros artistas nacionales, coincidimos que el talento o la habilidad “bruta” la agarramos aquí en Guatemala. Mucho de mi “técnica“, con la que empecé, la aprendí aquí en Guate de personas que hicieron muchísimo teatro. Quizás no fueron a las mejores escuelas o a las más caras, pero aprendieron haciendo y por su propia gana. 

Y esa fue mi escuela: si no tiene el recurso.. mire cómo le hace. Recibí actuación, dirección y producción de personas que forjaron sus propios caminos y que me enseñaron a ser autosuficiente. Mis maestros de fuera me refinaron y me dieron libertad de experimentar. Mis maestros de aquí me enseñaron a sobrevivir y a renacer. Por ello hoy me siento y me cuestiono si en serio: ¿todo lo extranjero es mejor?

Para cerrar mi día, tuve el privilegio de trabajar con un actor español espectacular y mientras veníamos de regreso de trabajar me comentó de la belleza del paisaje de Guatemala. Me dijo que era una de las cosas más maravillosas que había visto. Le agradecí, porque como todos los días lo puedo ver, no me tomo el tiempo. Los mismos extranjeros reconocen que tenemos cosas buenas aquí también. ¿Por qué nosotros no? ¿Por qué no le invertimos tiempo a nuestros artistas? ¿A nuestras causas?

Author Image
Martha Elisa Estrada Cortez

Previous Post

Next Post

One thought on “Lo Extranjero

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Privacy Preference Center